La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha sostenido en Pamplona, en el marco del "III Foro de Mujeres y Niñas con Discapacidad", que la apuesta por "un trabajo digno es por un trabajo seguro e inclusivo, que no discrimine".
"Un trabajo inclusivo implica no discriminar a las personas con capacidades diferentes que día a día demuestran, demostramos que tenemos muchas capacidades y las podemos desplegar en beneficio de la sociedad en la que vivimos y a la que nos debemos", ha sostenido en declaraciones a los periodistas.
De esta forma se ha pronunciado momentos antes de recibir el "Premio Cermi.es 2019", en la categoría de “acción en beneficio de las mujeres con discapacidad, un galardón que también ha recibido la alcaldesa de Villamuelas (Toledo), Carolina Alonso, y que reconoce la progresiva presencia de mujeres con discapacidad en la vida política e institucional, desempeñando responsabilidades públicas.
Valerio ha asegurado sentir "emoción y gratitud" por "este reconocimiento a esta humilde ministra en funciones como mujer que en estos momentos tiene reconocido un porcentaje de discapacidad porque ha pasado por una serie de vicisitudes a lo largo de su vida: con ocho meses la poliomielitis, un cáncer con 55 años, que han ido dejando una serie de secuelas que aunque no sean aparentes están ahí".
"Por suerte convivo con las secuelas que me han dejado estas enfermedades, porque convivir con estas secuelas significa que sigo viva, lo cual es un logro. Hay personas que en su lucha contra la enfermedad se dejan la vida y yo tengo el gran honor de haberla mantenido y de poder incluso realizar tareas que implican un relativo esfuerzo como el grandísimo honor de ser ministra del Gobierno de España", ha aseverado.
A continuación, al igual que en su intervención en el Foro, al que también ha asistido la presidenta de Navarra, María Chivite, ha hecho referencia algunas medidas aprobadas por el Gobierno de España y que tienen una mayor incidencia para las mujeres como la subida del salario mínimo interprofesional o la recuperación de la cotización para las personas cuidadoras de la ley de Dependencia.
Además, ha destacado que, a propuesta del CERMI, organizador del Foro, se introdujo una serie de modificaciones respecto a los autónomos en la discapacidad sobrevenida.
Asimismo como "muy importante" ha citado el logro de ampliar el derecho de sufragio a las personas con discapacidad, si bien "ha quedado pendiente la reforma del artículo 49 de la Constitución", a lo que ha agregado como relevante, dentro de los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030, el hacer que el trabajo digno sea inclusivo, una línea en la que incide el Plan director un trabajo digno.
Valerio ha comentado que, pese a todo, aún queda mucho por hacer y que "se necesita favorecer el talento futuro para salvar las situaciones de discriminación con las personas con capacidades diferentes y, especialmente, con las mujeres".
En el Foro, que reúne a más de trescientas mujeres y niñas con discapacidad, la presidenta de la Fundación CERMI Mujeres, Concha Días, ha asegurado que no conciben un mundo de progreso que no cuente con ellas, por lo que ha urgido a acabar con todas las formas de discriminación múltiple que siguen sufriendo las mujeres y niñas con discapacidad.
En su intervención, según informan en un comunicado, ha denunciado además que las mujeres con discapacidad están "más expuestas a las diferentes violencias machistas" y ha exigido acabar con las esterilizaciones forzosas por razón de discapacidad.
Por su parte, la consejera de Derechos Sociales, María Carmen Maeztu, ha subrayado el compromiso del Ejecutivo Foral para luchar contra todas las formas de discriminación.
A lo largo de la jornada se han escuchado también relatos en primera persona como el de Wafa El Elj, una mujer con discapacidad superviviente de violencia de género, que ha contado como su expareja le disparó con un arma, lo que le causó una lesión medular y que ha sostenido: "Una es lo que quiere ser y no sus limitaciones".
Alicia Ramajo ha relatado su tránsito para el cambio de género y ha apuntado que "la discapacidad no es solo por nuestros cuerpos, que son maravillosos, sino que la discapacidad es social y política por los prejuicios y la falta de apoyos que existen".
