El vicepresidente Manu Ayerdi recuerda que Navarra no tiene competencias sobre las pensiones ya que corresponden al Estado
Luego vendrán los críticas de que el Gobierno central persigue el autogobierno navarro, pero el Ejecutivo foral ya ha advertido de que la Iniciativa Legislativa Popular que pide que la pensión mínima en Navarra ascienda a 1.080 euros y la creación de un sistema propio de pensiones resultaría inconstitucional en caso de ser aprobada.
La iniciativa fue registrada por la Plataforma Pentsionistak Martxan en el Parlamento y éste decidió remitirlo al Gobierno para que diera su valoración ya que “supondría un aumento del gasto”. Tanto UPN como el PP rechazaron la tramitación de inicio, pero en la Mesa y Junta existe la costumbre no escrita de admitir a trámite absolutamente todo.
Pero más allá de que obligaría a incrementar el techo de gasto de los presupuestos, el portavoz de Geroa Bai, Koldo Martínez, ya advirtió de que “puede incurrir en inconstitucionalidad”, motivo que ha sido ratificado por el Gobierno de Navarra.
Más allá de lo que supondría elevar la pensión mínima a 1.080 euros, tal y como ha explicado el vicepresidente de Desarrollo Económico, Manu Ayerdi, “Navarra no tiene competencias en materia de pensiones”, por lo que no puede decidir si se suben o no se suben.
Esta misma iniciativa se registró también en el Parlamento Vasco y en la Comunidad vecina ni tan siquiera fue admitida a trámite por la Mesa del Parlamento con los votos contrarios de PNV, PSE y PP. Algo que fue criticado por Bildu por el sometimiento del PNV “a las limitaciones impuestas por el Estado”.
