Para cuadrar las cuentas pretenden reducir partidas de gastos más superfluos, incluida la remodelación del Palacio de Navarra.
Las enmiendas que presentará el Partido Popular a los presupuestos de Navarra se centran fundamentalmente en la creación de empleo, en las ayudas a las familias y en las ayudas a los más desfavorecidos, según ha anunciado esta mañana su portavoz parlamentaria, Ana Beltrán.
Beltrán ha querido dejar claro que “no se trata de un brindis al sol. Cuadramos las cuentas para no subir el techo de gasto”. Por eso, para compensar las enmiendas presentadas pretenden reducir las partidas de “gastos más superfluos”. La mayor reducción pretenden que se dé en la remodelación del Palacio de Navarra.
En el ámbito del desarrollo económico pretenden incrementar las ayudas a la creación de empresas y a los autónomos, así como realizar un plan industrial “para las zonas más desfavorecidas” como son la Ribera y la Sakana. También apuestan por la continuación de la segunda fase del Canal de Navarra y de las obras del Tren de Alta Velocidad.
En el aspecto sanitario, Ana Beltrán ha criticado que no se renueve el convenio con los trabajadores de la Universidad de Navarra porque “va a suponer más coste para la salud pública”. “El Ejecutivo pretende gobernar con su fobias por encima del interés general”, ha asegurado la portavoz del Partido Popular.
Las enmiendas en los derechos sociales se centran sobre todo en las ayudas para que las familias puedan conciliar la vida laboral y familiar. Y en Educación, Ana Beltrán ha criticado que “iba a ser el gran cambio y nos encontramos con que el presupuesto ha bajado en un millón de euros”. También pretenden incrementar las ayudas a las televisiones.
Estos incrementos presupuestarios se compensarían con la reducción de otras partidas como los gastos en eventos y actos, la publicidad, obras en edificios públicos, la oficina en Bruselas o las ayudas al fomento del euskera.
En este último apartado, Ana Beltrán ha querido dejar claro que “no queremos hacer oposición al euskera. Es un valor”, pero consideran que tiene presupuestada una “dotación excesiva” en relación con otros idiomas.
