El fenómeno de la diáspora se ha “reavivado” en los últimos años, coincidiendo con la “crisis económica”, de forma que desde el 2008 han emigrado al extranjero más de 6.500 personas.
La consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales del Ejecutivo foral, Ana Ollo, ha apostado hoy por “un modelo de retorno de talento intangible” para que los navarros en el exterior “puedan mantener la vinculación” con Navarra.
Así lo ha indicado en una comisión parlamentaria, a petición propia, en la que ha presentado el borrador de la Estrategia para la Ciudadanía Navarra en el Exterior, un proyecto que sigue abierto a la participación.
Ha precisado que el fenómeno de la diáspora se ha “reavivado” en los últimos años, coincidiendo con la “crisis económica”, de forma que desde el 2008 han emigrado al extranjero más de 6.500 personas nacidas en Navarra.
Tras apuntar que en el 2015 el total de jóvenes navarros residentes en el extranjero sumaba 4.496 personas, ha explicado que el Ejecutivo foral consideró “preciso” contar con un instrumento que contribuya “a la mejora de gestión de las relaciones” con la ciudadanía navarra que reside tanto en el extranjero como en otras comunidades autónomas.
Del diagnóstico elaborado hasta el momento, se concluye que nueve de cada diez personas (que han respondido a un cuestionario) manifiestan su interés por Navarra.
Así, ha sostenido que el retorno, en el caso de este colectivo afectado, “puede ser viable en torno a proyectos puntuales de colaboración” y que la estrategia de este borrador incluye tres ejes.
El primero está centrado en la comunicación y la conexión e incluye medidas como las alianzas con las universidades, apoyar a asociaciones en proyectos relacionados con la diáspora o acercarse a personas navarras en multinacionales.
Evitar la salida involuntaria de navarros y facilitar el regreso voluntario de estos es lo que pretende el segundo eje con acciones como ayudas de contratación de doctores, conectar ofertas de empleo a personas de diáspora, o la identificación de estudiantes excelentes del último curso universitario con el fin de “retenerlos ofreciéndoles salidas profesionales”.
El tercer eje aborda la cooperación activa e incluye iniciativas como la creación de una plataforma de colaboración pública – privada para coordinar acciones y agentes en relación con la diáspora o la identificación e incorporación de personas “altamente cualificadas en la diáspora” para mentorizar proyectos de interés para Navarra.
El portavoz de UPN, Juan Luis Sánchez de Muniáin, ha indicado que hay “una cierta diáspora”, que ha achacado en parte a la crisis y también a “la movilidad”, y ha apostado por la conectividad.
El socialista Guzmán Garmendia ha lamentado que Navarra fue “la primera” comunidad en presentar incitativas al respecto y “la última” en hacer un plan.
BELTRÁN: "SE QUEDA COJO"
Ana Beltrán, del PPN, ha comentado que el proyecto “se queda cojo”, ya que hay que intentar que vuelvan las personas “que se han ido o se estén yendo a otra comunidad”.
Por Geroa Bai, Virginia Alemán ha valorado “muy positivamente que por primera vez se promueva” esta iniciativa y que “es un fenómeno que requiere seguimiento” por los responsables públicos.
David Anaut, de EH Bildu, ha señalado que la ciudadanía navarra del exterior es “un activo”, que para el desarrollo de Navarra “puede ser positivo” y ha instado a que se aplique “un tiempo y una inversión”.
Desde Podemos - Orain Bai, Carlos Couso ha mostrado su preocupación por utilizar el término “talento” y ha advertido que “es difícil que quieran volver a un mercado de trabajo precarizado”.
Por su parte, José Miguel Nuin (Izquierda-Ezkerra) ha pedido distinguir entre aquellos que se van al exterior “en el marco de una economía abierta” y otros que salen por el “fracaso económico y laboral de la sociedad” y que el enfoque debe ser “al conjunto” de navarros.
Finalmente, en el turno de réplica, Ollo ha rechazado que esta sea una estrategia “elitista” ya que, ha dicho, se dirige a “cualquier persona que está fuera de Navarra”.
