La delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, ha afirmado que la Constitución de 1978 es "el reflejo de una España abierta y solidaria en la que pueden reconocerse todos y cada uno de los españoles".
La delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, ha afirmado que la Constitución de 1978 es "el reflejo de una España abierta y solidaria en la que pueden reconocerse todos y cada uno de los españoles" y en la que "los pueblos que la integran ven protegidas, reconocidas y respetadas sus lenguas, sus culturas, sus tradiciones y sus instituciones, como un verdadero patrimonio común que sin duda nos enriquece y nos identifica".
Alba ha intervenido este martes en un acto organizado por la Delegación del Gobierno en Navarra para celebrar el día de la Constitución española. Un acto que este año ha tenido como escenario el refectorio de la Catedral de Pamplona.
En su intervención, la delegada ha manifestado que "ningún proyecto de futuro se puede construir basándose en romper la convivencia democrática, ningún proyecto de progreso y libertad se sustenta en la división, y ningún proyecto puede conducir al aislamiento o al empobrecimiento de un pueblo".
Ha pedido así que "respetemos las reglas que todos nos marcamos, apostemos por fortalecer la estructura institucional, porque tenemos las mejores bases para seguir construyendo esta España plural de bienestar y de progreso que queremos para todos".
Según ha dicho, "la Constitución del 78 ha contribuido a lo largo de estos 39 años a la estabilidad política y social, a la vertebración territorial y a salvaguardar los derechos de los ciudadanos mediante el imperio de la ley".
"La Constitución de 1978 reconoce, por tanto, a España como nación y atribuye al pueblo español en su conjunto la soberanía nacional, lo que excluye toda posibilidad legal de separatismo unilateral", ha dicho, para señalar que "al tiempo, reconoce la realidad diversa de la nación española y ha hecho posible que las comunidades autónomas alcancen cotas de autogobierno impensables".
Ha manifestado la delegada que "somos un país en el que caben todas las ideologías y todos los planteamientos políticos con el solo requisito del respeto a la voluntad libre, soberana y democráticamente expresada por el pueblo español". "Voluntad recogida en nuestras leyes; leyes que no son una imposición arbitraria de un poder ajeno a la gente, en absoluto", ha aseverado.
Alba ha añadido que "estos días estamos asistiendo a un debate sobre una posible reforma de nuestra Constitución, aunque ésta esté plenamente vigente". Según ha expuesto, "los posibles cambios en nuestra Carta Magna tienen unos procedimientos ya establecidos que requieren de amplias mayorías" y "necesitamos el mismo espíritu de concordia que hubo entonces". "Cualquier cambio debe de abordarse desde los principios del diálogo, del respeto y del compromiso de todas las fuerzas políticas", ha dicho.
"Hemos visto en los últimos tiempos cómo esa Constitución que ha simbolizado y garantizado la convivencia democrática de los españoles ha sido objeto del ataque más grave de toda su historia", ha afirmado Alba, quien ha señalado que "gracias a las instituciones, especialmente al Tribunal Constitucional, y al conjunto de la sociedad, se ha sabido hacer frente al reto".
LECTURA DE LA CONSTITUCIÓN
El acto ha comenzado con la lectura de varios artículos de la Carta Magna. La primera en leer ha sido la delegada del Gobierno, Carmen Alba, seguida de un agente de la Policía Nacional y un guardia civil. También ha leído un artículo el patinador navarro, 12 veces campeón de España absoluto y actual campeón del Mundo de patinaje de velocidad en 100 metros contrarreloj, Joseba Fernández.
Además del deportista, también han procedido a la lectura de la Constitución una estudiante, el presidente de la Asociación Cultural Doble 12, Ricardo Guelbenzu; el presidente de la asociación Co.CiudadaNa, Eugenio Arraiza; Pilar Aramburo como representante de Sociedad Civil Navarra y César Magaña, capitán capellán castrense de Navarra.
