Sin ningún reparo, la socialista María Chivite ha puesto al frente de las relaciones institucionales del Gobierno foral a una de las anteriores consejeras más polémicas y, que sobre todo, generó el rechazo unánime de las víctimas de ETA en Navarra.
Ana Ollo, que comenzó su andadura con Uxue Barkos como portavoz del Gobierno y tuvo que ser reemplazada, consiguió que por primera vez en años las familias de las víctimas de ETA en Navarra se unieran para levantar la voz ante los continuos engaños de la consejera. Junto a ella estuvo al frente Álvaro Baraibar, un siniestro personaje que ocupó la dirección de Paz y Convivencia dedicada al blanqueamiento del terrorismo.
En un comunicado muy duro al poco de comenzar la legislatura, las víctimas del terrorismo sanguinario vasco criticaron a Ana Ollo por utilizarles mientras gobernaban con Bildu, un partido que sigue sin condenar a ETA y que, además, mantiene una estrecha relación de apoyo y protección a la banda.
"Las víctimas de ETA le pedimos al gobierno de todos los navarros que exija a ETA que se disuelva, que colabore con los casos sin resolver, autentico drama familiar, que exija la devolución de las armas y el perdón público a la sociedad por tanto dolor causado", esgrimieron sin éxito desde Anvite.
Ana Ollo se ha caracterizado durante los últimos años por equiparar a víctimas y verdugos y en comparar a las víctimas de ETA con las de la Guerra Civil o el franquismo. Además, en todo momento ha hablado de víctimas de "otra violencia", como si hubiera existido un conflicto bélico entre la sociedad y los terroristas.
Este es el principal perfil de la consejera escogida y nombrada por María Chivite, sobre quién recae la potestad final del acceso al gobierno de cada uno de los consejeros forales.
Hay que recordar que desde el Gobierno de Navarra se ordenó cerrar la página web que recogía todo el contenido sobre la historia de los asesinatos de ETA en Navarra, con el objetivo de esconder y tapar los 40 años de terror y sufrimiento que la banda provocó en Navarra
Ana Ollo es licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra y tiene estudios de doctorado en Ciencias Políticas por la Universidad del País Vasco.
Comenzó su trayectoria profesional como periodista trabajando en diversos medios de comunicación como la Cadena Ser (Radio Bilbao), Navarra Hoy, RNE en Vitoria y TVE en sus delegaciones de Bilbao y Pamplona. En 1991 comenzó a trabajar en la comunicación institucional, durante un año en el Gabinete de Prensa del Gobierno de Navarra y desde agosto de 1992, en la Universidad Pública de Navarra (UPNA), donde conformó el primer gabinete de comunicación de la institución. Ddirigió el Servicio de Comunicación de la UPNA hasta su incorporación al Gobierno de Uxue Barkos.
Es socia de Euskalherria Irratia, la radio en euskera que ha recibido cientos de miles de euros del Gobierno Barkos desde su llegada al poder.
