El senador de UPN Alberto Catalán ha lamentado que no se apruebe ninguna enmienda a la ley Celaá porque "el Gobierno o los partidos que sigan su estrategia" lo hayan decidido y ha opinado que negar las comparecencias de expertos es un "comportamiento propio de una ley mordaza".
Catalán ha calificado de "concesión al independentismo" el que un niño en cualquier lugar de España no se pueda escolarizar en su idioma: "es algo inadmisible e inconstitucional".
De esta forma se ha pronunciado en la Comisión de Educación del Senado, en la que el portavoz de Educación del PP en el Senado, Pablo Ruz, ha acusado a los socialistas de ser "destructores de la convivencia" con la Lomloe o ley Celaá al atacar, entre otras cosas, la libertad de las familias para elegir el centro que desean para sus hijos.
Lo ha dicho Ruz en la Comisión de Educación del Senado al defender el veto de su partido contra la Lomloe, que no ha salido adelante ni tampoco los vetos presentados por Ciudadanos y UPN, que han sido votados antes del debate sobre las 649 enmiendas presentadas por todos los partidos excepto por PSOE, ERC-Bildu y PNV.
Para el senador del PP, esta ley "nace muerta y con unilateralidad" y ha dicho que sentía "vergüenza" porque los socialistas "desprecian" al Senado y esta reunión de la Comisión era "una farsa".
"Cinco partidos absolutamente diferentes y dispares vamos a ser capaces de presentar enmiendas conjuntas sobre aspectos inocuos, neutrales, que podían ser contemplados en la ley y ustedes se niegan que se introduzcan para mejorarlo", ha explicado, respecto algunas iniciativas, por ejemplo, fijar Ética en cuarto de la ESO.
Los tres vetos, rechazados por la mayoría de la Comisión, han sido criticados por la portavoz socialista, Inés Plaza, que ha acusado al PP de "hacer un teatro".
"Estamos en democracia y si se juntan, aunque sean tres (en relación al PSOE, PNV y ERC-Bildu), son las reglas de la democracia", ha dicho Plaza en relación a que con su representación sea suficiente para no aprobar ni vetos ni enmiendas.
"Ustedes están en las nubes y de la mitad para abajo hay mundo", ha dicho Plaza al PP en relación a que critiquen que se vayan a eliminar las cuotas de los centros concertados que algunas familias no pueden pagar. También ha dicho que se "miente" cuando se dice que se vayan a cerrar centros de Educación Especial y ha negado que se ataque al castellano.
"Con la nueva ley se van a mezclar los ricos con los pobres" y eso les molesta, le ha dicho al PP.
El senador socialista José Manuel Vega ha dicho que PP y Cs deben estar muy "desesperados" para juntarse con el partido de Puigdemont en alguna enmienda.
María Ponce (Ciudadanos) ha dicho que "hoy es un día triste para la educación y para esta Cámara" y ha acusado al PSOE de falta de diálogo y de respeto.
"No sé qué hacemos aquí", ha recalcado Ponce, que ha acusado a los socialistas de simplemente estar "para apretar un botón".
Assumpció Castellví (Junts per Catalunya) ha dicho estar "triste" porque, aunque no le gusta ni la ley Celaá ni ley Wert, hasta el 25 de febrero (fecha legal para tramitar esta ley) se podía haber llegado a cuerdos entre todos. y que saliera adelante alguna de las 649 enmiendas presentadas en el Senado.
Eduardo Rubiño (Más Madrid), que también quiere que se derogue la ley Wert, se ha opuesto a los vetos porque la ley Celaá incluye muchas cosas positivas como sus artículos sobre la concertada o la Religión, pero ha criticado la tramitación de la ley Celaá en cuanto a que no haya sido "impecable" en el tema de participación o consenso.
Rosa Peral (PNV) y Adelina Escandell (ERC-Bildu) han rechazado los vetos alegando, especialmente, que había que derogar la Lomce y han negado que en Euskadi o Cataluña no se enseñe el castellano.
