El pleno del Parlamento de Navarra ha rechazado este jueves la toma en consideración de una proposición de ley presentada por EH Bildu para modificar la ley de residuos y su fiscalidad con el fin de "premiar y primar" a las entidades que lo hagan bien mediante "una adjudicación directa".
En defensa de la iniciativa, Adolfo Araiz, ha señalado la necesidad de que la gestión del fondo de residuos y su reparto priorice a quienes mejores resultados obtengan en el cumplimiento de los objetivos, ya que también el fondo se nutre bajo el principio de que "quien contamina, paga" y por lo tanto luego no puede a su juicio financiar a quien lo hace mal ni tampoco necesidades estructurales.
Se trata para la coalición abertzale de dar una compensación económica a las buenas políticas, de "premiar y primar", ha dicho, y defendido además la necesidad de establecer cómo se debe repartir ese dinero, "una adjudicación directa en función de los resultados", y fijar mediante ley los criterios de reparto.
Unos criterios que "no pueden quedar al albur del departamento ni de los intereses de determinadas entidades locales", ha subrayado, y propuesto atender a la recogida selectiva, cuando ninguna entidad supera el 50% en Navarra y la valorización total en la comarca de Pamplona, la mayor, no llega al 37%.
Ha considerado por eso que si legítima es la concurrencia competitiva también lo es lo adjudicación directa, a la que EH Bildu quiere dar una cobertura legal igual que a los criterios a la vista de los objetivos a cumplir para que no sea el Gobierno el que anualmente los marque.
Marisa de Simón, de I-E, ha apoyado la iniciativa recordando que la ley pretendía la reducción de residuos y de la contaminación mediante el reciclaje y la reutlización y para ello establece un impuesto a las malas prácticas, por lo que el fondo que genera no puede ser para quien lo haga mal, pero sí ha abogado por que pueda servir para ayudar a mejorar y para recuperar espacios degradados.
En contra de la proposición, Patxi Pérez Arregui, de Navarra Suma, ha afirmado que "la ley no soluciona los problemas, solo genera un impuesto más, porque quien contamina paga y quien no contamina también", y además la basura sigue "mal" tratada.
"Solo ha servido para engordar el fondo" con cuyo reparto ahora EH Buildu quiere "favorecer" a determinadas entidades, ha afirmado, y apostado por "disminuir la carga impositiva de familias y empresas para permitir la reactivación económica".
El socialista Javier Lecumberri, ha recordado que la ley dice que el fondo se crea para estimular y mejorar la gestión de los residuos y de su distribución se encarga el departamento de Desarrollo Rural, pero ahora EH Bildu pretende "premiar, discriminar positivamente, a los que mejor lo han hecho" y eso "supondría la exclusión de 9 de las 17" mancomunidades.
"Esta forma de reparto no puede ser. Habrá que premiar a las que quieren hacerlo bien", ha señalado, y añadido que se trata de "premiar a los que lo han hecho bien y a los que presentan proyectos para hacerlo bien" mediante un sistema de "concurrencia competitiva".
Por Geroa Bai, Jabi Azcona ha defendido la validez de la ley actual y rechazado la iniciativa abertzale porque en su grupo "no queremos repartir el dinero directa y nominalmente " sino que "creemos que es importante atender a los proyectos" para no "excluir" mancomunidades y permitir que puedan mejorar en su gestión.
Algo que "no es incompatible" con apoyar a quienes lo hacen bien, según ha precisado, al tiempo que ha apoyado que se atiendan además acciones de prevención y sensibilización.
Ainhoa Aznárez, de Podemos ha anunciado su abstención y apuntado que "el fondo, por el carácter del impuesto que lo alimenta, quiere ser un incentivo y debería garantizar la priorización en los criterios de reparto de quienes mejores resultados obtengan", pero "no debe ni pretende sustituir al plan director de residuos" en el reparto.
