El consejero Aranburu dice que para poder alcanzar estos objetivos se necesitará una importante inversión en medios materiales y humanos.
El Gobierno de Navarra ha aprobado el Plan de Lucha Contra el Fraude Fiscal para el periodo 2016-2019, con el que prevé recaudar 590 millones de euros, y otros proyectos de ley sobre delito fiscal y actividades económicas.
El Plan, junto a las fichas valoradas que acompañan al texto, ha pasado previamente un proceso de aportaciones del que han tomado parte la Comisión de Lucha Contra el Fraude Fiscal y la Economía Sumergida y los ciudadanos.
El borrador del plan se presentó en junio y desde entonces se ha sometido a un proceso de participación ciudadana a través de la web de Gobierno Abierto y el e mail [email protected].
Según ha destacado el consejero de hacienda, Mikel Aranburu, el plan intensifica las medidas previstas en la lucha contra el fraude fiscal.
El objetivo es recaudar 590 millones de euros hasta 2019, un impacto económico que supera en un 5 por ciento el del plan actualmente en vigor.
Con este fin, el plan detalla 220 medidas de actuación y entre las más novedosas Aranburu ha citado proyectos como el control de ventas al público o la obtención de un programa de selección de contribuyentes con riesgo fiscal.
El consejero ha aludido asimismo a la mejora del programa de análisis de contabilidades, la centralización de la información tributaria por inmuebles, el mayor acopio de información tributaria y la realización de actuaciones recaudatorias.
Para poder alcanzar estos objetivos se necesitará una importante inversión en medios materiales y humanos.
Por ello se ha incrementado en el presupuesto de 2017 la dotación para estos recursos en 1,5 millones de euros y se ha aprobado una OPE que contempla la convocatoria de 12 plazas de Gestor de Hacienda y 10 de Técnico que el Gobierno espera convocar en los próximos meses.
Además el nuevo Plan de Lucha contra el Fraude Fiscal 2016-2019 hace especial hincapié en el desarrollo de un programa de educación fiscal en colaboración con el departamento de Educación, con el que Hacienda ya ha comenzado a trabajar.
Junto al Plan, el Gobierno ha aprobado en la sesión otros proyectos de ley para modernizar la normativa tributaria foral en materia de delito fiscal, juego e impuesto de actividades económicas.
En relación con las haciendas locales se ha aprobado un proyecto que "clarifica" que las autovías de peaje en la sombra deben pagar la contribución territorial, comparte entre el Gobierno y los ayuntamientos la inspección del IAE, y determina que es el vendedor el sujeto pasivo que debe pagar la plusvalía municipal.
Además el Ejecutivo ha aprobado un proyecto que modifica la ley general tributaria de Navarra para, entre otros objetivos, "fortalecer a la Administración en el procedimiento del delito fiscal", ha comentado el consejero, y ha precisado que se trata de que Hacienda "no pierda recaudación" mientras se sustancian asuntos en sede judicial.
NAVARRA EJECUTARÁ LA DEUDA PÚBLICA
También, el consejero de Hacienda, Mikel Aranburu, ha informado de que el Gobierno de Navarra ejecutará la autorización de deuda dada por el Consejo de Ministros.
Fue el pasado viernes cuando el Gobierno central autorizó a Navarra a formalizar préstamos y a emitir deuda pública por un importe máximo de 81,75 millones para financiar así el déficit por desviación de 2015, un desfase que Aranburu había cifrado en 25 millones.
"La diferencia de criterio con el Ministerio está en el cómputo del one off que le llaman ellos, aquello que solo sucede una vez, porque hubo que pagar en 2015 la regularización de las aportaciones del Estado de 2013 y 2014 y la hepatitis C", entre otros elementos, ha aclarado Aranburu.
Y ha admitido que estas cuantías "son déficit porque se habían pagado pero no debían computar a efectos del objetivo de déficit".
El consejero se ha referido además al tramo autonómico del impuesto de hidrocarburos, de cuyo interés ha dudado para próximos ejercicios.
El titular de Hacienda ha recordado que con la reforma fiscal el Gobierno de Uxue Barkos decidió aplicar este impuesto "como medida provisional, como dosis de ataque" para incrementar los ingresos públicos.
"La recaudación se está comportando conforme a lo provisto", ha asegurado, pero ha añadido que sin embargo quizás haya que "modificar" el impuesto o "igual no es interesante mantenerlo" por "los efectos secundarios" que tiene.
