Desde que se produjo el desalojo, el centro de Pamplona ha sufrido la violencia de los ilegales y sus paredes se han llenado de pintura contra el Gobierno de Barkos.
A todas las pintadas que los que 'okupaban' el antiguo palacio del Marqués de Rozalejo, en la plaza de Navarrería, han realizado por las calles del Casco Antiguo de Pamplona hay que sumarle, desde esta noche, otra de carácter más amenazante.
Muchos de los que esta mañana de lunes han paseado por la zona, ya desierta de agentes de policía, se han percatado de que en la puerta que blindaron con hormigón armado han aparecido unas pintadas en las que los ilegales dejan clara su intención.
En castellano y en euskera, los violentos que han protagonizado incidentes durante toda la semana pasada, en la que incluso trataron de asaltar el Parlamento de Navarra y atacaron la sede del PNV con huevos y pintura, han marcado en la puerta un breve mensaje en el que puede leerse la palabra "volveremos" junto al mítico símbolo de 'okupación'.
Durante los pasados días, han sido continuos los enfrentamientos con la policía después de que el pasado martes, los técnicos de Patrimonio del Gobierno de Navarra, por orden judicial, desalojaran el edificio de titularidad pública para analizar su estado.
En su análisis, los profesionales del Ejecutivo foral señalaron que se había producido un claro "agravamiento" de sus condiciones y que podían resultar peligrosas para las decenas de ilegales que cada día frecuentaban el antiguo palacio del centro de Pamplona.
Junto a estas pintadas, los radicales han plagado de pintadas las paredes del centro de Pamplona clamando contra el Gobierno de Uxue Barkos, al que acusan de haber realizado un "desalojo encubierto, mezquino y rastrero" a pesar de que en el momento en el que los técnicos entraron, durante la madrugada del martes pasado, no había nadie en el interior.
Tras unos días de tensión, los 'okupas' han cejado en su intento por volver a 'reokupar' el edificio y eso que el propio vicepresidente del Gobierno de Navarra, Manu Ayerdi, aseguró que era "complicado" dadas las características del edificio.
No obstante, los ilegales han emplazado a la ciudadanía a una manifestación en Pamplona este próximo sábado, 19 de enero.
"ENÉRGICA CONDENA" DESDE EL PARLAMENTO
La Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra ha aprobado en su sesión una declaración institucional en la que expresa su "más enérgica condena" por las amenazas vertidas contra UPN, PNV y Geroa Bai como consecuencia de los incidentes registrados por la clausura de Rozalejo.
La iniciativa ha contado con el apoyo de UPN, Geroa Bai, PSN, PPN e I-U, y si han abstenido Podemos y EH Bildu, esta última coalición, ha dicho Adolfo Araiz, al considerar que en el texto faltaba una crítica por la actuación y las cargas policiales, algo que le ha reprochado Geroa Bai, que tampoco entiende que se pida la comparecencia de la presidenta Barkos y no la de la consejera de Interior.
Finalmente en la declaración aprobada el Parlamento muestra su condena por las amenazas a los citados partidos y considera "inadmisible" que las mismas sigan sucediendo "por constituir un ataque" que "rebasa los límites de la legítima crítica de una sociedad democrática".
El Legislativo foral muestra además su "solidaridad con los vecinos y vecinas afectadas por estos hechos así como con los comercios afectados", "reafirma su apuesta por la paz y la convivencia" y "considera que la violencia y la coacción nunca van a ser la solución de ningún conflicto".
