'Pamplona es flor' es una iniciativa que contará con cuatro nuevos jardines distribuidos por diferentes zonas de la capital.
Este próximo lunes, 6 de mayo, continúa la programación de 'Pamplona es flor' con la apertura de cuatro jardines efímeros basados en fractales (modelos geométricos que se repiten con regularidad en la naturaleza) y que, además, quieren representar cuatro valores que quiere reivindicar Pamplona: interculturalidad, igualdad, sostenibilidad y biodiversidad.
Además, para marcar su carácter inclusivo, los cuatro espacios, de alrededor de 100 m2, serán ejecutados por entidades de inserción sociolaboral y Escuelas Taller: Tasubinsa, Elkarkide, Lantxotegi y Fundación Ilundáin.
'Flores con causa', que es el título específico de esta actividad, se extenderá de 6 al 12 de mayo y sus escenarios serán el patio de Condestable, los corrales de Santo Domingo y dos zonas de la fortificación: el baluarte de Guadalupe y la herradura interior del Centro de Interpretación de las Fortificaciones en el baluarte de San Bartolomé, ha explicado en una nota el Ayuntamiento de Pamplona.
Todos los jardines serán realizados con 20.000 plantas en flor de diversos coloridos y elementos reutilizados y han sido diseñados por el Servicio de Parques, Jardines y Zonas verdes del Ayuntamiento de Pamplona.
Las formas-fractales elegidas: son la ramificada o 'arbórea', la espiral, la sucesión de curvas en un meandro y la hexagonal o 'de colmena'.
Cada jardín llevará su panel informativo.
Está previsto que este lunes 6 de mayo, entre las 11 y las 13 horas, se pueda asistir a la construcción del jardín de Condestable, una estructura ramificada con forma de árbol que representará estos días la interculturalidad de la ciudad.
Los trabajos de realización de los otros tres espacios comenzaron a principio de esta semana y los de Corralillos y baluarte San Bartolomé se rematarán el lunes.
Aunque el de Condestable es el único bajo techo, los otros tres jardines están en espacios acotados que se abrirán al público de 10 a 20 horas.
'Pamplona es flor' quiere ser un gran contenedor de iniciativas primaverales en la ciudad.
Comenzó en marzo y reúne trabajo transversal de varias áreas municipales de cara a "la sostenibilidad, la potenciación del entorno urbano, el fomento del turismo y de la sensibilidad artística".
Hasta el 12 de mayo en la ciudad se están sucediendo más de una veintena de actividades como los jardines efímeros de Naturart, visitas a los parques singulares, recorridos por las 'joyas silvestres' o plantaciones, como los barrios de colores.
Todas las actividades tienen carácter gratuito y pueden consultarse en la web municipal www.pamplona.es.
Para la realización de los jardines se emplearán flores de temporada como Begonias, Tagetes, Petunias, Alisum o Nomeolvides.
Se emplearán 3.000 plantas en el jardín de Corralillos de Santo Domingo, 4.000 en el de Condestable, 6.000 en el del baluarte de San Bartolomé (herradura del Centro de Interpretación de las Fortificaciones, en el parque de la Media Luna), y 7.000 en el del baluarte de Guadalupe, que se podrá contemplar desde el mirador del Caballo Blanco.
El Ayuntamiento de Pamplona pretende que el destino final de una parte de las plantas empleadas en estas creaciones sea llegar a los centros educativos mediante una campaña que asocie las flores y los valores.
La forma arbórea (fractal ramificado) será realizada por personal de Elkarkide en el Patio Renacentista de Condestable y quiere simbolizar la interculturalidad, "la interacción igualitaria entre personas y grupos con identidades culturales específicas, una interacción que multiplica el patrimonio cultural y social de la ciudad".
La espiral ejecutada por Fundación Ilundáin se levantará en Corralillos.
Será un jardín representativo de la igualdad "como parte de la dignidad inherente a todos los seres humanos"; en este dibujo floral todas y cada una de sus partes son necesarias para configurar el resultado.
En el entorno del patrimonio fortificado de Pamplona habrá dos jardines más.
El fractal asignado a la Escuela Talller Lantxotegi en el baluarte de Guadalupe quiere reproducir el meandro del Arga a su paso por Pamplona, una silueta que va marcando curvas cada vez más pronunciadas hasta acabar perdiendo flujo.
Representará la sostenibilidad, "la satisfacción de las necesidades actuales sin comprometer los recursos para el futuro; un espacio para repensar el sistema de consumo y el equilibrio global".
El del baluarte de San Bartolomé, finalmente, será llevado a cabo por personal de Tasubinsa y se basa en un fractal hexagonal (geometría de colmena) que quiere representar la vocación de la ciudad como refugio. Dedicado a la Biodiversidad, "transmite la amplia variedad de seres vivos resultado de millones de años de evolución y también la variedad de sus ecosistemas y genéticas que sustentan la vida sobre el planeta".
