El Ayuntamiento de Pamplona y la Federación de asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica de Navarra, COCEMFE, van a promover el buen uso de la tarjeta de aparcamiento reservado para personas con discapacidad a través del reparto de unas fundas para guardar estas acreditaciones que recuerdan a través de un decálogo cómo debe ser el uso de las mismas.
El objetivo de esta iniciativa es, ha indicado el Ayuntamiento, informar de una manera sencilla sobre la manera en la que se debe realizar el uso de estas tarjetas, así como atajar posibles situaciones de abuso de su utilización por parte de familiares de la persona beneficiaria o a través de fotocopias para su colocación en varios vehículos al mismo tiempo.
Este tipo de actitudes, ha añadido, perjudican directamente a otras personas que también necesitan las plazas de aparcamiento reservado, y que, en ocasiones, por el mal uso de las tarjetas, se las encuentran ocupadas. El uso incívico de esta tarjeta puede suponer sanciones de hasta 500 euros e incluso la retirada de la propia tarjeta, de manera temporal o permanente.
A partir de ahora, ha precisado el concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu, cada nueva tarjeta que se entregue en las oficias de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Pamplona llevará esta funda, que también incluye situaciones habituales en su uso con sus correspondientes buenas y malas prácticas.
Además, incluye un código QR con el que se podrá acceder a la web en la que está publicado el propio decálogo, y que está accesible para toda la ciudadanía. Los usuarios que ya dispongan de su tarjeta de aparcamiento reservado para personas con discapacidad pueden solicitar su funda en las propias oficinas de Seguridad Ciudadana o en la sede de COCEMFE Navarra, en la calle Mendigorría, 12 del barrio de la Chantrea.
CONTINÚA LA LABOR DE CONCIENCIACIÓN
Esta iniciativa continúa el camino marcado por la campaña 'Ponte en mi lugar. No lo ocupes' presentada a finales de pasado año por el Ayuntamiento de Pamplona y COCEMFE Navarra para promover el respeto en el uso de las plazas de aparcamiento reservadas y evitar comportamientos incívicos como ocupar dichas plazas sin la correspondiente tarjeta.
Una campaña que se acompañaba de la colocación de figuras a tamaño real de personas en silla de ruedas en diferentes plazas reservadas de la ciudad.
En Pamplona hay a día de hoy 3.150 personas con movilidad reducida que pueden aparcar en las más de 1.100 plazas que están señalizadas y reservadas para ellas. El pasado año la Policía Municipal de Pamplona denunció a 175 personas por usarlas sin tarjeta, además de retirar 64 tarjetas por mal uso.
