El alcalde ha gastado dos millones de euros y ha apresurado todo lo posible las obras del antiguo Colegio María Auxiliadora.
Las obras del edificio de Salesianas, que dotarán a la Chantrea de un reformado espacio de encuentro sociocultural para el vecindario -articulado alrededor del salón de actos del antiguo Colegio María Auxiliadora- así como de un mejor espacio para la atención social a la ciudadanía a través de los nuevos locales de unidad de barrio, ya están en la recta final.
Los miembros de la Gerencia y de la Comisión de Urbanismo han visitado este miércoles el edificio en cuyas obras de adecuación el Ayuntamiento de Pamplona ha invertido más de un millón de euros de cara a obtener una nueva dotación pública para el barrio, además del millón destinado a su adquisición (se cerró en el mes de diciembre de 2017). La idea municipal es que Salesianas sea un espacio con un alto nivel de participación vecinal en su gestión.
Una parte importante de las obras consisten básicamente en adecuar la accesibilidad del edificio, estancias de la primera planta y su salón de actos, que también ha sido renovado, de manera que el inmueble pueda albergar usos vecinales y una oferta sociocultural estable.
El edificio cuenta con numerosos tramos de escalera, incluso en el exterior, y con rampas que no cumplían la normativa sobre accesibilidad, por lo que adecuar accesos era prioritario.
En el transcurso de la visita los técnicos han explicado a los ediles que durante estos días se van a instalar las nuevas acometidas de agua, gas, electricidad y ventilación, tras lo que se completará el suelo de pvc y las moquetas, ha informado el Ayuntamiento.
Además, próximamente se colocará el ascensor en la nueva estructura para hacer accesible el conjunto del edificio y, asimismo, se instalará un aseo para minusválidos en la planta baja. De esta manera, antes de que termine el año, se espera recuperar el conjunto de espacios de edificio de Salesianas, en estos momentos mayormente en desuso, para que puedan ser disfrutados por el barrio.
UN ESPACIO DE ENCUENTRO Y OCIO PARA EL BARRIO
La primera parte de las obras ha consistido en la renovación y accesibilidad del salón de actos, que ha requerido una inversión de 613.206 euros. El edificio original, el Colegio María Auxiliadora, disponía de un salón de actos de grandes dimensiones, con caja escénica y espacios de servicio con buenas características técnicas, de aforo y acústicas.
La intervención tiene como objetivo dotar de funcionalidad al espacio ya existente y mejorar sus prestaciones para pueda servir de punto de encuentro para actos socioculturales del vecindario, además de ser un 'contenedor' de oferta cultural específica programada entre el vecindario y el Consistorio, mediante un sistema de cogestión, en el que ya se está trabajando.
Entre las obras ejecutadas para lograrlo hay tres actuaciones principales. La primera es la adecuación del salón de actos a la normativa vigente sobre incendios. La segunda comprende las actuaciones, tanto de urbanización como interiores, que son necesarias para cumplir con la normativa de accesibilidad desde el acceso principal, que se efectuará a través de la calle Cuenca de Pamplona. Y la tercera obra consiste en la instalación de un nuevo ascensor, de manera que se podrá acceder al salón de actos desde la entrada principal.
En la actualidad ya está ejecutado el foso y la estructura, a falta de colocar el ascensor, que está previsto que llegue esta semana. El ascensor será una cabina de doble embarque a 180 grados que les permitirá salvar la diferencia de alturas que existe entre la cota del vestíbulo interior y el vestíbulo previo al salón de actos.
De esta manera el ascensor permitirá solucionar la accesibilidad, no solo del salón de actos, sino de todos los locales y estancias de la primera planta del edificio. Asimismo las obras servirán para incorporar dos nuevos camerinos y un pequeño aseo en la zona del escenario, así como para situar en planta baja un nuevo aseo de minusválidos.
La intervención mejorará, además, las condiciones acústicas de la sala, cambiando los revestimientos que existían por otros que, además de cumplir la normativa, aportarán confort acústico. En la actualidad ya están colocados los rastreles de madera, de 3 metros de altura, sobre la que se instalará la moqueta.
UNA UNIDAD DE BARRIO QUE ATIENDE ANUALMENTE A 4.700 PERSONAS
Por otra parte, la intervención en el edificio, ha permitido reservar espacio en planta baja para los nuevos locales de la unidad de barrio de Chantrea, que es la tercera en volumen de actividad de la ciudad, tras Rochapea y Milagrosa. Las obras de reforma de esa planta del inmueble, cuyo importe asciende a 357.506 euros, se destinan a albergar esos servicios sociales, mejorando tanto las condiciones de atención a la ciudadanía que acude a esas dependencias municipales, como las condiciones laborales del personal municipal que realiza su labor profesional en ellas.
La intervención en ese espacio ha consistido en el derribo y vaciado del interior del ala izquierda, eliminando carpinterías exteriores (hojas y persianas), tabiquerías, carpinterías interiores y falsos techos. Las carpinterías se han sustituido por otras monobloc en PVC oscilo batientes, cajón de persiana integrado y lamas en aluminio reforzado. También se sustituye la calefacción por una de mejores prestaciones y radiadores de alto rendimiento, además de dotar a esta parte de una red de ventilación con recuperación de calor para minimizar el consumo energético.
Las anteriores instalaciones de la unidad de barrio de la Chantrea habían quedado limitadas, tanto por las necesidades del servicio tras el aumento de la demanda y del número de trabajadores en la unidad. La unidad de barrio de la Chantrea atiende anualmente a alrededor de 4.700 personas.
