Entre octubre de 2015 y abril de este año, han estado recibiendo formación teórico-práctica con contrato de trabajo desde el primer día.
Este jueves ha tenido lugar la clausura de la VIII Escuela Taller de Empleo de Atención a personas en situación de dependencia en instituciones del Ayuntamiento de Pamplona. Entre octubre de 2015 y abril de este año 15 personas han estado recibiendo formación teórico-práctica, con contrato de trabajo desde el primer día.
Además, 12 personas del alumnado tienen tres meses de trabajo garantizado gracias a la firma de compromisos de inserción ya desde la fase de proyecto. En las anteriores ediciones la media de inserción laboral de las personas formadas ha sido de un 80 por ciento, según ha informado en una nota el Ayuntamiento de Pamplona.
El alumnado ha recibido este jueves el diploma y próximamente recibirán el certificado de profesionalidad de título homónimo que permite a quien lo obtiene trabajar en instituciones como personal cualificado, una titulación que en 2016 se ha convertido en obligatoria para ese desempeño.
La iniciativa incluye también formación complementaria en otros campos de interés para los alumnos como primeros auxilios, igualdad, alfabetización informática o búsqueda de empleo, además de la obtención del Carné de manipulación de alimentos.
Al acto de clausura han asistido el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, la concejala delegada del Área de Acción Social y Desarrollo Comunitario del Ayuntamiento pamplonés, Edurne Eguino, y el director general del Observatorio de la Realidad Social, de Planificación y de Evaluación de las Políticas Sociales de Gobierno de Navarra, Patxi Tuñón.
La escuela taller de empleo está cofinanciada por el Gobierno de Navarra, a través del Servicio Navarro de Empleo, el Fondo Social Europeo (FSE) y el Ayuntamiento de Pamplona. El presupuesto de la ETE ha sido de 131.447 euros.
El perfil del alumnado ha sido mayoritariamente femenino, con 14 mujeres y un hombre y la media de edad se establecía en los 39 años. El 87 por ciento de los alumnos son de nacionalidad española y 8 de los 15 entraban en la escuela con estudios a nivel de Bachiller.
De las 900 horas de formación, 360 se han destinado a la llamada 'obra social' entre el 1 de diciembre y el 23 de marzo. Dentro de estas actividades los alumnos han trabajado en activación funcional y estimulación cognitiva, atención personal y acompañamiento. Las clases teóricas se han impartido en los locales municipales de Errotazar (paseo de Enamorados, 47) que, además de las aulas y los recursos docentes, incluidos los audiovisuales, albergan una cocina, una cama articulada y los elementos necesarios para ofrecer esta formación.
UN SECTOR EN AUGE
El objetivo de las escuelas taller es mejorar la empleabilidad de sus alumnados. En el caso de la de atención a personas en situación de dependencia en instituciones, se busca la inserción laboral de estas 15 personas en un sector que es, de hecho, yacimiento de empleo porque en él existe demanda de trabajadores cualificados, según ha destacado el Ayuntamiento de Pamplona.
El índice de inserción laboral de anteriores escuelas con este contenido ha superado de promedio el 80 por ciento y en la edición hoy clausurada un 33 por ciento de las personas participantes se encuentran ya trabajando.
Además, el Consistorio ha remarcado que las acciones formativas que se emprenden en ese ámbito tienen la virtualidad de recaer sobre un sector de trabajo 'feminizado', por lo que mejorar las condiciones de desempeño contribuye asimismo a mejorar la situación de las trabajadoras del sector y la atención que se presta a mayores y dependientes en la ciudad.
Los centros en los que se ha realizado esas tareas son los apartamentos tutelados del Ayuntamiento de Pamplona (activación funcional y estimulación cognitiva) y empresas del Grupo Amma S.L.U (Multilva y Oblatas); Sarquavitae (valle de Roncal e Infanta Elena); Solera Asistencial-La Vaguada; Residencia Beloso Alto S.L.; Residencia Landazábal-Setenasa Gestión S.L. y Centro Ramón y Cajal de Fundación Aspace (atención personal y acompañamiento).
Una vez culminado el curso trabajarán en estas mismas empresas al menos 12 de los 15 alumnos, con contrato a jornada completa durante un periodo mínimo de tres meses, gracias a los compromisos de inserción.
