Se trata de una iniciativa del Ayuntamiento de Pamplona, en la que colabora Greenpeace, para concienciar sobre el cambio climático.
La Plaza del Castillo de Pamplona, en su confluencia con la avenida Carlos III, se ha convertido hoy en una playa con arena, sombrillas, tumbonas y un chiringuito, dentro de una iniciativa del Ayuntamiento de Pamplona, en la que colabora Greenpeace, para concienciar sobre el cambio climático.
"Mójate por el clima", que es la denominación de la campaña, coincide con la celebración este mes de diciembre en París de la Cumbre Mundial por el Clima, informa el Ayuntamiento de Pamplona en un comunicado.
Desde las doce del mediodía, técnicos municipales han informado a las personas que se acercan hasta este lugar sobre las consecuencias del cambio climático y sobre cómo "mojarse" por el clima.
El Ayuntamiento invita a toda la ciudadanía a participar en esta actividad que trata de escenificar dos de los múltiples efectos que tendrá el cambio climático: la subida del nivel del mar, que anegará países isleños y ciudades costeras, y la subida de las temperaturas medias globales.
Los expertos en clima señalan que el incremento de más de dos grados en la temperatura media del planeta tendrá efectos catastróficos como la subida del nivel del mar, la desertificación de zonas en climas áridos, el aumento de la frecuencia e intensidad de fenómenos climáticos extremos o la pérdida de biodiversidad, entre otros.
Este evento coincide con la celebración en París de la vigésimo primera conferencia sobre el cambio climático (COP21) en la que participan los 195 países formantes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
En la inauguración y las primeras sesiones, países como Estados Unidos y China, que son los más contaminantes del mundo, han mostrado su disposición a asumir compromisos serios contra el cambio climático ya que, por ejemplo, las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial aumentaron un 24 % entre 2000 y 2010.
El Ayuntamiento de Pamplona invita a la ciudadanía a "aportar su granito de arena" en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, tomando medidas para ello en las rutinas de la vida cotidiana de cada persona.
Algunos consejos son usar modos de transporte sostenible en la movilidad por la ciudad (ir a pie, en transporte público o en bicicleta); reducir el consumo energético en casa tanto en climatización como en electricidad; e instalar energías renovables en casa (calderas de biomasa, paneles solares térmicos y fotovoltaicos, entre otros).
Asimismo, aconseja consumir de forma responsable, y además productos locales, de kilómetros cero y de producción ecológica, así como reutilizar, reducir los residuos y reciclarlos, especialmente la materia orgánica, depositándola si es posible en los puntos de compostaje comunitario y, en su caso, en el quinto contenedor.
