Los objetivos de esta carrera, que durará 11 días, impulsar el el euskera y recabar fondos para los euskaltegis de AEK.
El alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, ha recibido este miécoles en su despacho de la Casa Consistorial a representantes de la Coordinadora de Alfabetización y Euskaldunización /Alfabetatze Euskalduntze Koordinakundea AEK, con los que ha hablado de la Korrika. En concreto, han participado en el encuentro, Mertxe Mugika, coordinadora general de AEK; Asier Amondo, responsable de la Korrika; y Xabi Gartzia, miembro de Artezkaritza de AEK.
La Korrika comenzará este año el 30 de marzo en Otxandio (Vizcaya) y terminará el próximo 9 de abril en Pamplona. El Consistorio está trabajando actualmente en un marco de colaboración con AEK para facilitar el desarrollo de esta iniciativa a su paso por Pamplona. Asimismo, los representantes de AEK han presentado al alcalde la campaña de promoción de la Korrika. Este año el lema es ‘Batzuk’ y la canción elegida ha sido ‘Zirkorrika’ de la banda pamplonesa Jarauta 69.
El objetivo de la Korrika es por una parte impulsar la concienciación a favor del euskera, y por otra, recabar fondos para llevar a cabo dicho trabajo día a día en los centros de aprendizaje de euskera de AEK. La primera edición se celebró en 1980 y actualmente se organiza cada dos años. De forma paralela a la carrera se organizan numerosas actividades culturales y lúdicas en las localidades por las que transcurre.
2.000 KILÓMETROS
Durante la Korrika, que es continúa durante las 24 horas, los corredores portan un testigo que va pasando de mano en mano cada kilómetro y que contiene un mensaje que se hace público en la llegada. A la cabeza de la marcha suele ir la persona que porta el testigo y cada kilómetro cuenta con una persona o asociación que "lo compra" para ayudar económicamente a la entidad. Durante 11 días que durará este año recorrerá más de 2.000 kilómetros.
AEK es una organización que tiene como objetivo la recuperación del euskera y su enseñanza. Trabaja en la alfabetización de adultos así como en la investigación y edición de material didáctico, preparación de profesorado, organización de actividades culturales, programas que impulsan la utilización del euskera, diseño e implementación de planes de normalización para empresas e instituciones y campañas de concienciación.
