Salud ha indicado que "no obedece a motivaciones económicas", que su aplicación "coincide con el descenso de la demanda asistencial en los meses de verano".
La Gerencia de Atención Primaria ha procedido un año más a una reorganización horaria en los centros de salud de Pamplona durante los meses de julio y agosto, con el objetivo de "garantizar la asistencia sanitaria al conjunto de la población y de hacerla compatible con el derecho al descanso vacacional de la plantilla de profesionales sanitarios".
En concreto, el horario de verano se aplicará desde el 15 de julio hasta el 1 de septiembre próximos, período en el que todas las consultas ordinarias de los centros de salud de Pamplona serán atendidas por los profesionales habituales de la zona básica en horario de 8 a 15.20 horas. El lunes 2 de septiembre se reanudará en estos centros de salud el horario habitual en Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud, ha informado el Ejecutivo foral en un comunicado.
La aplicación de esta medida ha sido consensuada con las direcciones de los equipos de Atención Primaria, al igual que se hizo para el período estival de 2018.
En los próximos días se colocarán carteles informativos en los centros de salud de Pamplona para dar a conocer la implantación de este horario de verano y la atención en horario de mañana de todas las consultas ordinarias que durante el año se cubren por la tarde. Los carteles informativos estarán editados en castellano y euskera.
El Departamento de Salud ha indicado que esta medida "no obedece a motivaciones económicas", que su aplicación "coincide con el descenso significativo de la demanda asistencial en los meses de verano" y que "ha tenido en años anteriores una buena aceptación por parte de la población".
La media del descenso de la demanda asistencial en los meses de julio y agosto se sitúa en torno al 35% en Pediatría y en el 25% en Medicina de Familia.
Con esta reorganización horaria "se armoniza el derecho de los profesionales al descanso vacacional con el derecho de la población a recibir una adecuada atención sanitaria". "Además se adopta en un contexto marcado por las dificultades de contratación para cubrir las vacantes propias del período estival, como consecuencia del importante déficit estructural de profesionales que afecta no sólo Navarra sino también al conjunto del Estado", ha subrayado el Gobierno navarro.
Esta falta de profesionales "es especialmente acentuada en especialidades como Medicina de Familia y Pediatría de Atención Primaria".
Para paliar esta situación, el Departamento de Salud ha ampliado para el próximo año a 40 el número de plazas de formación para Médico Interno Residente en Medicina Familiar y Comunitaria (MIR), una decisión "de carácter estratégico para afrontar la actual carencia de profesionales sanitarios".
También se iniciará la formación de seis profesionales Especialistas en Enfermería Familiar y Comunitaria (EIR).
