Solicitan una reunión en la que los trabajadores puedan exponer las razones por las que no se les debería trasladar a otra área.
Los trabajadores del Programa de Infancia y Familia del Ayuntamiento de Pamplona sale al paso del reciente anuncio de la reestructuración de áreas municipales y el traslado de varios de sus programas y servicios a un nuevo área denominada Desarrollo Comunitario, competencia que corresponde actualmente al Área de Acción Social y Desarrollo Comunitario.
Los trabajadores lamentan que después de solicitar reiteradamente una reunión con el cuatripartito que ostenta el Gobierno municipal, solo dos de ellos accedieron a reunirse y escuchar sus sugerencias.
El objetivo de la cita sería contrastar los rumores aparecidos hasta ahora y exponer las razones técnicas por las que el dispositivo de Servicios de Acción Preventiva Comunitaria no debiera salir del Programa de Infancia y Familia. Sin embargo, los "grupos con mayor representación en el consistorio", tal y como especifica el personal adscrito al programa en un comunicado, no respondieron a la petición o se negaron a escucharlos.
En su opinión, se cuenta actualmente con cuatro dispositivos completamente engranados: dos en los Servicios Sociales de Atención Primaria (Servicios de Acción Preventiva Comunitaria y Equipos de Infancia y Familia) y otros dos especializados (Equipo de atención a la Infancia y Adolescencia en Dificultad Social y el Programa de Intervención Familiar).
Hasta el momento, los Servicios de Acción Preventiva Comunitaria desarrollan sus funciones dentro del marco de los Servicios Sociales, trabajando la prevención primaria con la población infantil y adolescente, junto con los Equipos de Infancia y Familia de los distintos barrios de la ciudad. En el caso de una salida a otra área, se separaría su labor del medio natural donde es óptimo desarrollar su función, esgrimen.
Por otro lado, añaden que, en caso de asumirse por otra área el Desarrollo Comunitario y los Servicios de Acción Preventiva Comunitaria, lo que se estaría haciendo sería situar a los Servicios Sociales únicamente en una función meramente asistencial, privando a la población de la prevención primaria de situaciones de desprotección y riesgo infantil y adolescente, desde la perspectiva de la acción social y promotora de derechos universales.
SIN VALORACIONES TÉCNICAS
El personal se pregunta qué sentido tiene traspasar su cometido a otra área, cuando en la actualidad su función se está desarrollando de forma integral y sin costes añadidos. También se plantean la cuestión de qué valoración técnica se ha realizado para tomar la decisión del cambio, ya que, según indican, el Gobierno municipal no les requirió ningún asesoramiento.
Ante este hecho, cabría abrir un interrogante -apuntan- sobre si el Ayuntamiento habría medido bien las consecuencias que tendría sobre el trabajo, o si habría valorado el impacto sobre la población que se atiende: niños, niñas y adolescentes. "Se trata de desmontar un sistema público de promoción, prevención e intervención bien coordinado, y debilitarlo al diluirlo en áreas compartimentadas", afirman.
Por todo ello, vuelven a solicitar al Ejecutivo municipal que mantenga con ellos una reunión, en la que puedan exponer las razones técnicas por las que no consideran conveniente ni el traspaso de las funciones de Desarrollo Comunitario a una nueva área, ni el traslado de los Servicios de Acción Preventiva Comunitaria.
