El alcalde y su grupo municipal de Bildu todavía no han condenado en ningún pleno municipal los asesinatos de ETA.
Sin condenar los asesinatos de ETA y con meses de retraso, el alcalde de Pamplona ha vuelto a menospreciar a las víctimas de los terroristas al pretender colocar sin ningún tipo de consenso las placas que los colectivos de víctimas exigían en su recuerdo.
Joseba Asirón ha colocado dos placas en Pamplona en memoria del niño Alfredo Aguirre y del policía Ángel Postigo en las que ha omitido de forma deliberada que ambos fueron "asesinados" por la banda terrorista y que no murieron de forma casual, sin que se trató de atentados programados por los asesinos.
Esta posición del alcalde ha indignado a alguna de las víctimas, que se han negado a que el nombre de su familiar aparezca en una placa de una manera tan poco precisa, en lo que consideran una mala intención del alcalde, siempre tan cercano a los terroristas.
De hecho, Asirón sólo ha conseguido colocar 2 de las 27 placas de personas asesinadas por ETA, ya que las otras 25 familias o no han dado su visto bueno o ni siquiera han querido tener como interlocutor a un representante de Bildu, un partido heredero de Batasuna, ilegalizada por pertenecer a la misma ETA.
Como ejemplo más evidente se encuentra la familia de Tomás Caballero, concejal de UPN en Pamplona asesinado por los terroristas en mayo de 1998. La familia de Caballero se ha negado a que se coloque una placa en los términos en los que pretende Asirón, sin hacer referencia a que Caballero fue asesinado.
"Colocar una placa mencionando únicamente que se hace en memoria de Tomás Caballero, dejando constancia de su fecha de nacimiento y fallecimiento, con la mera mención a su condición de víctima de ETA, no responde al verdadero sentido de la memoria que se trata de perpetuar, ya que no se debe tratar únicamente de recordar a una persona fallecida, sino de las circunstancias en que se produjo su muerte: por asesinato de una banda terrorista. Esto es lo que nunca se debe olvidar, para que nunca se vuelva a repetir", señala la familia Caballero.
"Consecuentemente, con gran sentimiento, no podemos dar nuestra conformidad a la colocación de la placa que nos proponen", concluyen en su misiva.
Otras víctimas localizadas por este periódico han confirmado que ni Asirón ni el consistorio se han puesto en contacto con ellos o que, directamente, no han dado la autorización para que Bildu les contacte. Consideran que un partido que no condena a ETA no tiene legitimidad para hacerlo.
LAS PLACAS COLOCADAS
La solicitud de las placas en recuerdo de las víctimas del terrorismo abertzale fue aprobada hace ya dos años en el Parlamento de Navarra y, desde entonces, Asirón ha hecho todo lo posible por evitarlo. También el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) pidió que se llevara a cabo, pero Bildu y el cuatripartito desdeñaron siempre su solicitud, demostrando de nuevo que no tienen ningún interés en mostrar cercanía con las víctimas de ETA.
Por el momento, Asirón ha colocado las placas de dos víctimas, cuyas familias han autorizado a colocarlas. En ninguna de las dos placas se dice que esas personas fueron cruelmente asesinadas por los terroristas vascos. Se trata de la que recuerda a Alfredo Aguirre, de 14 años de edad, que se ha colocado en la Bajada de Javier, donde fue asesinado el 30 de mayo de 1985, y la del policía Ángel Postigo se ha ubicado en la confluencia entre las calles Marcelo Celayeta y Bernardino Tirapu, en el barrio de la Rochapea.
En ambos casos el texto se inicia con la frase 'en memoria de' y recoge el nombre de la víctima, la fecha de nacimiento y muerte y las palabras 'víctima de ETA', en castellano y euskera. En ambos casos se omite la palabra "asesinado".
Desde el grupo municipal socialista han criticado que, a pesar de la colocación de las placas, Bildu no haya condenado aún a la banda terrorista.
Asirón ha explicado que de algunas de las familias de los asesinados en Pamplona el consistorio no tiene sus datos y que su "intención es ir colocando estas placas en función del ritmo" con que se vayan recibiendo los datos requeridos.
El alcalde abertzale precisado que se ha tratado de contactar con cinco familias que se podían localizar en Pamplona, a quienes se les expuso el "esquema de trabajo". De momento dos de ellas aceptaron, otra familia manifestó que prefería que no se colocara la placa para evitar un "recuerdo perenne", mientras que las otras dos respondieron de manera negativa a la solicitud.
Asirón, que no ha condenado como alcalde ninguno de estos brutales asesinatos, ha llegado a decir que la colocación de las placas es "un paso relevante en esa reivindicación de memoria, dignidad, reconocimiento y reparación para todas las víctimas".
Bildu y Joseba Asirón equiparan de manera constante a los asesinados y a los asesinos, a los que considera también víctimas y para los que pide su libertad sin que cumplan sus penas de prisión.
ASESINADOS POR ETA EN PAMPLONA
· 1.- Joaquín Imaz Martínez (26/11/1977)
· 2.- José Manuel Baena Martín (11/01/1978)
· 3.- Manuel López González (09/05/1978)
· 4.- Francisco Berlanga Robles (02/01/1979)
· 5.- Pedro Fernández Serrano (05/04/1979)
· 6.- Carlos Sanz Biurrun (08/10/1979)
· 7.- Jesús Vidaurre Olleta (01/05/1980)
· 8.- José Oyaga Marañón (01/05/1980)
· 9.- Angel Postigo Mejías (15/06/1980)
· 10.- José Luis Prieto García (21/03/1981)
· 11.- Vicente Luis Garcerá López (17/04/1982)
· 12.- Alberto Toca Echeverría (08/10/1982)
· 13.- Antonio Conejo Salguero (28/05/1983)
· 14.- Fidel Lázaro Aparicio (28/05/1983)
· 15.- Jesús Blanco Cereceda (27/06/1983)
· 16.- Jesús Alcocer Jiménez (13/04/1984)
· 17.- Tomás Palacín Pellejero ( 13/04/1984)
· 18.- Juan José Visiedo Calero ( 13/04/1984)
· 19.- José Luis Ollo Ochoa (27/05/1984)
· 20.- Diego Torrente Reverte (07/06/1984)
· 21.- Francisco Miguel Sánchez (30/05/1985)
· 22.- Alfredo Aguirre Belascoain (30/05/1985)
