Las obras de reforzamiento de la estructura del ascensor se han ido prolongando en el tiempo y se ha ido retrasando su fin hasta la semana que viene.
Tras varios retrasos en las obras, el ascensor urbano de Lezkairu, que conecta las calles Monjardín y Valle de Egüés, volverá a estar en funcionamiento a finales de la semana que viene. Se prevé que los trabajos que se están realizando en su entorno concluyan para el viernes 16 de junio. Básicamente, se están llevando a cabo labores de reforzamiento de la estructura del elevador.
Desde el pasado 29 de mayo, la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Pamplona ejecuta en la zona unas obras de subsanación y reparación de desperfectos de la urbanización de Lezkairu. Esos trabajos se han prolongado en el tiempo y se ha ido retrasando su fin hasta la semana que viene, según ha informado el Ayuntamiento en una nota.
El ascensor urbano de Lezkairu entró en funcionamiento en marzo de 2012 y salva en 7,5 segundos una distancia de doce metros entre ambas calles. Está acristalado en todo su perímetro, excepto en parte de sus laterales, que alojan los mecanismos de iluminación, aire acondicionado y un panel de información.
Además, la cabina, en forma de prisma rectangular para su mejor integración en el entorno, cuenta con una cámara de vídeo-vigilancia y acceso directo de voz a un puesto de mando centralizado. El presupuesto del ascensor fue de 450.000 euros y formaba parte de los trabajos de la tercera fase de la urbanización de Lezkairu.
