El Ayuntamiento de Pamplona ha decidido mantener el albergue Jesús y María abierto las 24 horas del día y no exclusivamente en horario nocturno durante el mes de abril, y hasta el fin del estado de alarma que está marcado en principio para el 9 de mayo por la Covid-19.
La decisión municipal está motivada por la intención de trabajar procesos y resolver las situaciones de las 26 personas que se encuentran actualmente alojadas en ese centro, ya que la presencia profesional durante su estancia facilita las labores de coordinación y acompañamiento, una tarea que ya de por sí es compleja ante la escasez de recursos habitacionales.
Así lo ha comunicado este viernes la concejala delegada de Servicios Sociales, Acción Comunitaria y Deporte, María Caballero, en el seno de la Comisión Covid celebrada este viernes en el Ayuntamiento. El albergue de Jesús y María funciona habitualmente como albergue turístico o peregrinos que realizan el Camino de Santiago. No obstante, el Ayuntamiento decidió habilitar este recurso para acoger a personas sin hogar tanto en la primera ola de la pandemia de la Covid-19, hace ahora un año, como desde el pasado 1 de noviembre, tras la entrada en vigor de las nuevas limitaciones de movilidad. Desde principios de enero de este año, el albergue amplió su horario para acogerá los usuarios durante el invierno.
Entre las 26 personas alojadas hay un grupo de 4 que está a la espera acceder a una prestación económica a finales de este mes con la que podrían buscar un alojamiento, ya sea en un piso compartido, ya en una pensión. Hay un segundo grupo más nutrido de personas usuarias que obtendrá su prestación en los dos próximos meses y, finalmente, hay un tercer grupo para el que hay que buscar alternativas habitacionales, bien a través de ayudas extraordinarias, o bien mediante el acceso a otro tipo de alojamientos como pueden ser albergues temporales de mayor duración como el de Centro de Atención a Personas sin Hogar de Trinitarios, comunidades terapéuticas, etc…
La apertura ininterrumpida durante las 24 horas permitirá ofrecer a los alojados un servicio completo (higiene, necesidades socio sanitarias y ocupacionales, etc.), facilitar su manutención y evitar que se encuentren en la calle durante el día. Esta decisión tiene, además, el efecto inducido de que se reduce mucho el consumo de alcohol y otras sustancias tóxicas, lo que facilita la convivencia y reduce los niveles de conflicto, dentro del centro y en su entorno.
En todo caso, la limitación en el tiempo de esta medida está vinculada al hecho de que, aunque el funcionamiento extraordinario de este recurso municipal ahora mismo es necesario, la coexistencia de usuarios en el centro durante más horas también supone un mayor riesgo de que aparezcan contagios de Covid entre usuarios.
