El portero se retiró lesionado en el encuentro ante el Getafe y ha sido sometido este lunes a varias pruebas médicas.
Las pruebas practicadas al portero de Osasuna Rubén Martínez, lesionado en el partido del domingo en Getafe, han descartado una lesión del ligamento cruzado, pero han evidenciado un esguince de grado II en el ligamento lateral interno, que "hace poco probable" que pueda volver a competir en este año 2019.
Así lo ha señalado el club navarro tras ser sometido el cancerbero a unas pruebas médicas en la Clínica Universidad de Navarra para valorar el alcance de su lesión, después del traumatismo sufrido en la rodilla derecha en el encuentro del domingo ante el Getafe.
Las pruebas han descartado una lesión en el ligamento cruzado. Sin embargo, han evidenciado que el guardameta sufre "un esguince de grado II en el ligamento lateral interno con edematización del mismo, compatible con una lesión parcial del ligamento lateral interno".
El futbolista ha iniciado desde este lunes su proceso de recuperación y queda pendiente de evolución, aunque es poco probable que pueda volver a competir en lo que resta del 2019, aseguran las mismas fuentes.
