• viernes, 29 de marzo de 2024
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POLÍTICA

Sánchez agranda la división en el PSOE con su oferta a las fuerzas del cambio

Cada vez son más los dirigentes territoriales del PSOE que abogan por celebrar un Comité Federal para discutir la posición del partido.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en la sede del partido. EFE. FERNANDO VILLAR.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en la sede del partido. EFE. FERNANDO VILLAR.

La división en el PSOE entre los defensores del "no es no" y los partidarios de una mínima abstención de última hora no ha hecho más que agrandarse tras el debate de investidura de esta semana, en el que el portazo de Sánchez a Rajoy y su oferta de diálogo a las "fuerzas del cambio" han soliviantado a los críticos.

En una semana convulsa para los socialistas, en la que todas las presiones internas y externas se dirigían al secretario general, fuentes del partido reconocen que éste ha vuelto a ganar tiempo en la batalla interna que libra con los barones autonómicos, al hacer un llamamiento que nadie esperaba a Podemos y Ciudadanos para buscar una "solución" que evite las terceras elecciones.

Un golpe de efecto que descolocó a propios y extraños y que los más críticos atribuyen a una mera maniobra de supervivencia.

Aunque cada vez son más los dirigentes territoriales del PSOE que abogan por celebrar un Comité Federal para discutir la posición del partido, solo el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández-Vara, se ha atrevido a pedir públicamente la abstención para investir a Rajoy.

De ello se sirve la dirección socialista, que ha llegado esta semana a retar a los 'barones' a que "recojan firmas" para forzar la reunión del Comité, ya que no entra en los planes del secretario general convocarlo al menos hasta después de las elecciones vascas y gallegas del 25 de septiembre.

Según los Estatutos del PSOE, bastaría que lo pidiera un tercio de los 295 miembros del Comité Federal para que la Ejecutiva tuviera que convocar obligatoriamente a este órgano, que decide las grandes líneas políticas del partido.

Los críticos, sin embargo, descartan por el momento esa posibilidad, que avivaría -dicen- "tensiones internas" en sus federaciones.

En declaraciones a Efe, un veterano miembro del Comité Federal no ha descartado que la presidenta andaluza, Susana Díaz, defienda en ese cónclave la vía de la abstención para evitar las terceras elecciones.

Según la misma fuente, la estrategia pasaría por una serie de intervenciones previas de dirigentes como el presidente asturiano, Javier Fernández; el castellanomanchego, Emiliano García-Page, el extremeño, Guillermo Fernández-Vara, el valenciano Ximo Puig y el aragonés Javier Lambán.

El impacto contra Sánchez sería tal que podría obligarle a dimitir, apunta esta fuente

Susana Díaz, entretanto, guarda silencio a la espera de ver qué pasos dan "todos los actores políticos", ha apuntado recientemente su portavoz parlamentario, Mario Jiménez.

Los expresidentes Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero son los mayores defensores de que el PSOE cambie de posición para evitar unos nuevos comicios. "Pactar no es traicionar", insistía ayer mismo Zapatero.

Entre los partidarios de negociar la abstención se habla ya de las contrapartidas políticas que debería exigir por ello el PSOE y algunos como el senador andaluz José Martínez Olmos, las han empezado a exponer en las redes sociales.

Martínez Olmos propone diez condiciones, la primera, que sea una "legislatura corta con la apertura de la ponencia constitucional para una reforma de la Constitución que blinde derechos y resuelva el desafío territorial".

Sustituir la reforma laboral por otra pactada, reunir con urgencia el pacto de Toledo para garantizar la sostenibilidad de las pensiones sin recortes, subir el salario mínimo, derogar la "ley Wert" y la "ley mordaza', eliminar aforamientos y apartar de la vida pública a sospechosos de corrupción como Rita Barberá son otras de esas condiciones.

La dirección del PSOE no prevé, en cambio, que los partidarios de abstenerse en la investidura de Rajoy logren una mayoría suficiente en el Comité Federal para cambiar su posición.

Fuentes cercanas a Sánchez han asegurado a Efe que creen que al final no habrá 'barones' ni dirigentes territoriales destacados que se atrevan a pedir abiertamente la abstención del PSOE a un gobierno del PP.

En esa línea, el portavoz parlamentario de los socialistas, Antonio Hernando, ha dicho esta semana en RNE que le parece "inconcebible" que el Comité Federal acuerde un "cambio de criterio" al no rotundo que Sánchez argumentó desde la tribuna.

Sin embargo, el mencionado histórico del partido consultado por Efe, insiste en que "el Comité Federal no apoyará unas terceras elecciones" y no descarta que un empecinamiento de Sánchez le conduzca finalmente a "dimitir o a que la dirección le destituya".

Sánchez, que cuenta con el apoyo mayoritario de las federaciones con menos peso orgánico, como Galicia, País Vasco, Castilla y León, Baleares, Murcia y Madrid, se ha enfrentado por el momento a la enésima batalla para mantener su liderazgo con el arma que mejor maneja: el de posponer el choque interno. 


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