• viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 11:23
 
 

NACIONAL

El presidente Puigdemont se someterá en septiembre a una cuestión de confianza

Busca comprobar si dispone de una mayoría parlamentaria suficiente como para seguir gobernando, después del veto de la CUP a los presupuestos.

false
false

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha anunciado este miércoles que en septiembre se someterá a una cuestión de confianza en el Parlament, para comprobar si dispone de una mayoría parlamentaria suficiente como para seguir gobernando, después del veto de la CUP a los presupuestos.

Una vez que el pleno de la cámara catalana rechazara, con los votos de la CUP y del resto de la oposición, la admisión a trámite de los presupuestos, Puigdemont ha solicitado intervenir desde la tribuna de oradores para exponer las consecuencias que se derivarán de este bloqueo presupuestario propiciado por quienes teóricamente eran los socios que debían dar estabilidad al Govern.

En un tono contrariado, Puigdemont ha constatado que su gobierno "ha perdido la mayoría necesaria" para llevar a cabo sus planes y que han cambiado las condiciones previstas en el acuerdo de estabilidad firmado en enero con la CUP.

"No tengo ningún interés en alargar injustificadamente el mandato. Yo quiero hacer la independencia", ha dicho tras acusar a la CUP de "deslealtad".

"TRISTEZA Y DECEPCIÓN"

El presidente catalán ha indicado que de la cuestión de confianza se derivará si tiene el respaldo mayoritario para seguir gobernando o si, en cambio, se abre un proceso "para unas nuevas elecciones".

Puigdemont ha dicho -con "tristeza y decepción"- que Junts pel Sí (CDC y ERC) ganó las elecciones con 1,6 millones de votos y retiró a su candidato, Artur Mas, "en aras de mantener viva la ilusión y la hoja de ruta", mientras que 10 diputados de la CUP, que representan unos 300.000 votos, "no puede retirar una enmienda a la totalidad", para concluir: "No hay proporción, ni lógica ni lealtad".

"Confiaba en ustedes, les he defendido hasta el final, mucha gente confiaba en ustedes", ha agregado dirigiéndose a la CUP, partido que, a su juicio, "ha decepcionado las esperanzas de millones de personas movilizadas estos años y que no tenían otro cálculo que Cataluña fuese un Estado independiente".

En un discurso de unos 15 minutos, y tras admitir que ha "perdido la mayoría necesaria" para cumplir con el plan de gobierno, el presidente catalán ha afirmado que no desea tener que administrar los "trastos" de un presupuesto prorrogado que, ha recalcado, "no tenía el mandato de la independencia como lo tiene éste".

"ENFRENTARSE AL ESTADO"

Asimismo, ha reconocido las vicisitudes de "enfrentarse al Estado" con una prórroga presupuestaria, lo que es, ha dicho, como "cazar elefantes con escopetas de balines".

En este contexto, Puigdemont ha remarcado que el Govern no puede quedar ni "en manos" de los grupos que exigen renunciar a la hoja de ruta, ni a expensas de los que "exigen la independencia solo a su manera y con su estrategia, aunque contradiga el modelo de la sociedad de la mayoría", en alusión a la CUP.

Ha justificado la cuestión de confianza porque no tiene ninguna garantía de que la CUP, con las resultados del pacto actual, cumpla en los próximos meses con su compromiso de empezar a negociar los Presupuestos de 2017, propuesta que, ha ironizado, podría "mutar", porque los acuerdos con ese partido "tienen vida propia".

Pese a todo, Puigdemont ha querido lanzar un "mensaje de esperanza" a los independentistas, a los que ha garantizado que no renunciará "a la hoja de ruta hacia el futuro y la libertad de Cataluña".


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
El presidente Puigdemont se someterá en septiembre a una cuestión de confianza