El monarca, que participaba por primera vez en una manifestación, ha sido recibido con gritos de "fuera, fuera" y una pitada.
El rey Felipe VI ha participado por primera vez en una manifestación y ha estado presente en la marcha convocada en Barcelona en contra del terrorismo, tras los salvajes ataques yihadistas de la semana pasada en la ciudad condal y Cambrils.
El monarca, que ya había participado en la manifestación tras los atentados del 11-M en Madrid aunque entonces como príncipe, ha sido recibido en el Paseo de Gracia por el presidente de la Generalitat, el presidente del Gobierno y la alcaldesa de Barcelona.
Carles Puigdemont, Mariano Rajoy y Ada Colau le han saludado a las 17.50 horas, cuando se han oído pitos y gritos de 'fora, fora' (Fuera, fuera). Tras el saludo protocolario, las autoridades se han dirigido a pie hacia la cabecera de la manifestación, junto a la Gran Via.
Al llegar a la cabecera, Felipe VI ha saludado a representantes de seguridad, emergencias y otros miembros de la sociedad civil, que han formado la primera fila de la marcha.
Durante estos saludos previos a la marcha, las pancartas que reclamaban la paz y repudiaban el terrorismo se han visto eclipsadas en parte por otros carteles portados por manifestantes que pretendían relacionar al jefe de Estado con el tráfico de armas.
“Felipe, quien quiere la paz no trafica con armas” o “Felipe VI y el Gobierno español, cómplices del comercio de armas”, se ha podido leer en algunos de estos carteles.
