El terrorista ha explicado que su misión en Pamplona era "buscar infraestructura, colaboradores y casas".
El miembro de ETA Alberto María Ilundain Iriarte alias 'Mollejas' ha admitido este miércoles en la Audiencia Nacional su pertenencia a la banda terrorista que le envió, en 1993, a Pamplona para buscar colaboradores para el 'comando Nafarroa'.
Se ha desvinculado no obstante, de las acusaciones de la Fiscalía que le relaciona con el depósito de armas y explosivos en un zulo y dos pisos francos. Según ha explicado, en respuesta a las preguntas de su abogada, estuvo en la ciudad poco tiempo --un máximo de tres meses-- y se marchó poco antes del San Fermín de aquel año para evitar "todo el revuelo que supone".
El fiscal José Perals ha reducido a la mitad su petición de penas tras retirar la acusación de integración, debido a que ya cumple 35 años de prisión en Francia por asociación de malhechores. Pedía en un inicio 24 años de prisión por los delitos de pertenencia a banda armada, depósito de armas y tenencia de explosivos.
'Mollejas' ha explicado que su misión en Pamplona era "buscar infraestructura, colaboradores y casas". Como es natural de la ciudad, conocía a mucha gente. El fiscal no sólo le integra en el comando sino que también le acusa de haber ocultado en un piso de la localidad Navarra de Arraiza --propiedad de Josu Zabala--, a varios miembros de dicho comando al que, siguiendo órdenes de la dirección de la organización terrorista, proporcionó infraestructura.
EXPLOSIVOS, ARMAS Y MUNICIÓN
En julio de ese mismo año recogió explosivos, armas y munición en el cementerio de Ororbia y los trasladó al piso franco, dice el fiscal. Además, se le atribuye haber participado en las prácticas de tiro que realizaron miembros de ETA, según la acusación del Ministerio Público.
Ilundain Iriarte fue detenido en Francia junto con otros tres miembros de la banda --Gregorio Vicario Setien 'Santi', Dolores López Resina 'Tere o Lola', y el francés Didier Aguerre 'Sua'--, en septiembre de 2001 y cumplió allí condena por robar 1.650 kilos de dinamita.
La justicia francesa les condenó a 18 años de cárcel, con la obligación de cumplir íntegramente la mitad de la pena, por el robo de explosivos en un depósito cercano a Grenoble. En 2012 el Gobierno popular solicitó a Francia ampliar la petición de extradición cursada en 2001 contra Ilundain Iriarte para poder juzgarle en España.
