La Asociación solicitará la reparación gratuita, un coche de sustitución si es necesario y la correspondiente indemnización si disminuyen las prestaciones del vehículo.
Ya son decenas las personas que han contactado con la Asociación de Consumidores de Navarra Irache porque pueden verse afectadas por la manipulación de emisiones de algunos coches de Volkswagen. Ante esta posibilidad, Irache pide tranquilidad a los posibles afectados hasta que se conozca de forma precisa la actuación de la empresa en esta cuestión.
Los abogados y peritos de Irache están estudiando este tema y están viendo qué posibilidades de reclamación tienen los consumidores. Por el momento, es importante que los posibles afectados mantengan la calma a la espera de noticias.
En cualquier caso, la Asociación solicitará la reparación totalmente gratuita de cualquier vehículo afectado. Además, la iniciativa para llevar a cabo estos trabajos debe ser de la compañía, que es quien debe contactar cuanto antes con el consumidor para comunicarle si su vehículo está afectado, explicarle qué arreglos quieren efectuar en él y las consecuencias que pueden tener en el turismo.
Al mismo tiempo, el concesionario deberá poner a disposición de cada afectado un vehículo de sustitución durante el tiempo que duren las reparaciones de su turismo, siempre que sea necesario.
Si como consecuencia de estas reparaciones, el vehículo sufre una pérdida de potencia, variación de su consumo o cualquier disminución en sus prestaciones, Irache solicitará la compensación económica correspondiente.
Hay que tener en cuenta que en las ventas de los coches en los que se ha manipulado las emisiones se ha podido dar una falta de conformidad en la compra, ya que el concesionario vendió al consumidor un vehículo con unas características diferentes -en este caso los datos de emisiones- de las que realmente tenía.
En todos los casos, es conveniente que el consumidor exija un documento que certifique las actuaciones realizadas en el vehículo.
Desde Irache lamentamos este tipo de noticias, que suponen un claro desprestigio para una compañía que cuenta con una notable valoración de los consumidores, especialmente en Navarra. En cualquier caso, el consumidor no es sino la víctima de estas situaciones y no puede verse perjudicado en ningún caso por la deficiente praxis de la compañía.
