Su próximo torneo será el Masters 1000 de Shanghái, en el que partirá como décimo cabeza de serie.
El español David Ferrer, cabeza de serie número cinco del Abierto de China, confió en seguir con la misma dinámica que ha alcanzado en el torneo que ha disputado en Pekín, donde ha caído este sábado en semifinales contra el británico Andy Murray, en sus próximos compromisos.
"Esperemos seguir con la dinámica en los siguientes torneos que me quedan", comentó el tenista de Javea, de 34 años, tras terminar su partido contra Murray, primer favorito y número dos del mundo, en el que perdió por 6-2 y 6-3.
Ferrer, que accedió a semifinales al eliminar en cuartos al joven alemán Alexander Zverev en un partido que duró dos horas y veinte minutos, acusó ante Murray el cansancio acumulado, aunque reconoció que su oponente fue mejor.
"He empezado bien, no he empezado mal, pero ha sido mejor Andy (Murray). Me ha costado, el partido de ayer lo he pagado un poco físicamente, me faltaba frescura en mis piernas", repasó Ferrer.
El español hizo una lectura "positiva" de su participación en el torneo pequinés y aseguró que había sido su mejor semana de la temporada después del Abierto de Australia, cuando también fue batido por Murray en semifinales.
Ferrer destacó haberse sentido "mejor mentalmente" y "profesionalmente" durante el Abierto de China, en el que repitió la semifinal alcanzada el año pasado, que perdió contra el serbio Novak Djokovic, que terminó ganando el título.
En su camino hasta la semifinal, el de Xàbia se impuso al uruguayo Pablo Cuevas en primera ronda, el italiano Fabio Fognini en octavos y el alemán Zverev en cuartos.
"Me voy bien, ahora cansado y un poco triste, pero me voy con ganas de hacerlo bien", dijo el español.
Su próximo torneo será el Masters 1000 de Shanghái, en el que partirá como décimo cabeza de serie y se medirá en primera ronda con su compatriota Feliciano López. "Va a ser duro", avisó Ferrer.
