Accidentado tercer encierro del Pilón de las Fiestas de Falces con dos heridos y una vaca que ha tenido que ser rescatada del barranco por el que se ha precipitado este martes.
El encierro ha comenzado puntual, a las 9 en punto de la mañana, pero las vacas parecían remolonas y han regresado al corral. En un segundo intento la manada también se ha vuelto.
Todo eso, a pesar de que los mozos más experimentados han tratado de dirigirlas. Un esfuerzo que ha quedado en balde.
No obstante, dos de las diez reses siguieron el recorrido en su dirección habitual, hacia el pueblo.
Precisamente, una de esas vacas se ha fijado en un mozo guipuzcoano al que ha revolcado en varias ocasiones contra el talud, aunque sin llegar a cornearle. Justo en el lugar que los lugareños denominan fuente de Los Pajaricos.
Esta vaca, de la ganadería de Teodoro Vergara, ha sido la única que ha terminado el recorrido, llegando hasta abajo. No sin dejar a su paso momentos de verdadero peligro.
De hecho, ha bajado muy distraída. Parándose y fijándose en los mozos. Incluso, ha llegado a embestir contra el vallado desde el que contemplaban el festejo numerosos espectadores.
Ya a pocos metros del pueblo, justo donde se ubica la plataforma reservada para la prensa, ha pillado desprevenido a un hombre que trataba de retirarse de su carrera.
Al verse apurado, el mozo ha resbalado y la res se ha fijado en él. Le ha embestido en repetidas ocasiones ante las miradas de pánico de todos los allí presentes.
Finalmente, el mozo se ha incorporado y se ha retirado del recorrido por su propio pie. Presentaba un visible golpe en la parte trasera de la cabeza.
La segunda vaca que ha seguido el recorrido no ha tenido tanta suerte. A pocos metros del lugar en el que se han vuelto sus hermanas, la ya mencionada fuente de Los Pajaricos, se ha precipitado por el terraplén.
Y se ha llevado consigo a un corredor que no ha podido evitar ese cambio de dirección. El joven ha sido rescatado sin mayores lesiones que algún que otro rasguño.
Por su parte la vaca ha precisado de no menos de cincuenta personas para ser rescatadas. El equipo se ha compuesto de voluntarios, personal de Protección Civil y agentes de la Policía Foral. Finalmente, ha sido llevada ensogada hasta el pueblo.
Este singular encierro del Pilón de Falces ha dejado un balance de siete heridos. Uno de ellos, el que ha sido prendido junto a la plataforma de prensa, ha tenido que ser trasladado al Hospital Universitario de Navarra con pronóstico reservado.
