Instantes previos al chupinazo varios jóvenes han repartido enseñas vascas que, al parecer, después se han convertido en un 'estorbo'.
Ha vuelto a ocurrir. La ikurriña se ha convertido una ocasión más en protagonista del inicio de las fiestas de una de las principales localidades de Navarra.
Tafalla ha dado comienzo este lunes a sus fiestas patronales y sobre uno de los balcones del Consistorio de este municipio ha ondeado la enseña vasca. Sin embargo, no todas las banderas de la comunidad vecina que se han podido ver en la plaza Navarra, lugar desde el que se lanza el cohete, han sido tratadas por igual.
Mientras el alcalde de la ciudad del Cidacos, Arturo Goldaracena (EH Bildu) se ha propuesto 'imponer' el emblema vasco desde su balcón consistorial, la imagen que se veía precisamente desde ese punto era bastante diferente.
Entre la multitud, que se había congregado frente al Ayuntamiento de Tafalla para empezar sus fiestas, también se ha podido ver a un grupo de jóvenes que ha repartido ikurriñas y banderas con el lema del acercamiento de los presos etarras instantes previos al lanzamiento del cohete.
Unos estandartes que se han levantado en el momento justo del lanzamiento del cohete, pero que después, los propios jóvenes se han deshecho y no han dudado en arrojarlas al suelo, llegando a pisotearlas sin ningún tipo de reparo para continuar con la fiesta.
Precisamente, este pasado domingo se colocó en esa misma plaza una gran bandera de la Comunidad foral para protestar, de forma previa, por la intención del cuatripartito de 'imponer' la bandera de la comunidad vecina.
Por su parte, la delegación del Gobierno ya ha anunciado que recurrirá la colocación de la ikurriña en el Consistorio tafallés, así como en el de Burlada, que también ha comenzado este lunes sus fiestas patronales.
También algunos partidos en Navarra han mostrado su preocupación después de que, una vez más, se "insultara" a muchos ciudadanos colocando la enseña vasca en un edificio público de la Comunidad foral.
