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COMERCIO LOCAL

El conocido bar de Pamplona que busca a mujeres maltratadas para darles trabajo

La colombiana Yolanda Bonilla ha reabierto el establecimiento y quiere recuperar el ambiente con un menú muy económico.

Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY
Yolanda Bonilla en el Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY

El bar Amanecer de Pamplona, situado en la calle Esquíroz 5 en el barrio de Iturrama, abrió de nuevo sus puertas hace pocas semanas bajo la dirección de la colombiana Yolanda Bonilla.

Este conocido bar de la capital navarra está muy cerca de otros negocios que hemos visitado en este apartado de comercio local, como es el caso de Asados Labea o el restaurante de comida asiática Kung Fu Ramen.

La colombiana Yolanda Bonilla Montoya lleva veinte años en Pamplona, donde han nacido sus hijos Alejandro y Queralt. Primero tuvo un supermercado en Huarte durante trece años y ha aprovechado la oportunidad de coger el bar Amanecer en el grupo Rinaldi. 

Yolanda explica: "Llevo veinte años en Pamplona. Vine de vacaciones y me quedé. Tuve un supermercado trece años en Huarte. Lo vendí y quería algo más pequeño en plan más tranquilo. Así es como encontré este sitio".

Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY
Yolanda Bonilla en el bar Amanecer de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY

"Yo quería algo con cocina para elaborar algo distinto. La persona que lo llevaba lo quería traspasar y lo cogí. La opción es trabajar con maltrato de género o mujeres maltratadas como se dice ahora", afirma Yolanda Bonilla.

A estas mujeres les suelen dar ayudas "pero siguen en su círculo en su casa con su mismo ambiente. No trabajan, están solo con sus hijos y siguen viviendo su mismo encierro. Deben pensar en salir un poquito y no con el miedo de salir a la calle".

"Si empiezan a trabajar aunque sea con pocas horas cuidando de sus hijos o haciendo sus cosas pero intentando salir, eso les ayuda más rápido para quitarse de la cabeza lo que les ha sucedido", indica Yolanda.

"Yo lo que quiero es cocinera o gente de hostelería. No hace falta que sepan, sino que tengan actitud para trabajar y me gustaría trabajar con esa clase de personas. He hablado con algunas y de momento estamos esperando".

Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY
Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY

Este bar lo ha cogido hace muy poco: "Estoy adecuando la decoración para sentarnos y trabajar con estas personas. No estoy con ninguna asociación ni por ayudas ni por nada".

"Esto lo hago yo directamente. No hay nadie a la espalda. Estas personas no se deben aislar. Tienen que aprender a perder ese miedo para tener vida propia", señala Yolanda.

Quiere a trabajar con un menú bastante económico y un producto variado: "Vemos que es bastante costosa la comida en esta zona. Más o menos 9,50 euros con su primero, segundo, ensaladas, postre y la bebida". Las tortillas de patata no faltarán en la barra con mucha variedad y pinchos.

Hay dos pinchos elaborados por ellos que no hay en Pamplona: "Una hamburguesa con salsa de champiñones y el 'cuco' que es un pan hueco que rellenamos y lo haremos al horno", asegura.

Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY
Yolanda Bonilla en el bar Amanecer de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY

Yolanda quiere recuperar a antiguos clientes que tenían la costumbra de jugar al mus: "No vamos a ser los típicos que nos interesa este cliente y este no. Las personas que venían a jugar al mus o a pasar un rato esta puerta se les volvió a abrir. Unas personas vinieron a preguntar por este tema y ya saben que pueden entrar cuando ellos quieran".

El bar Amanecer era un local muy concurrido, de esos de toda la vida en el barrio. En los años noventa se hizo popular el campeonato de mus cuando su dueño era Jesús Mena.

Los primeros campeones fueron Javier López y Jesús Marañón en 1990. Los premios fueron de hasta 50.000 pesetas para cada uno de los componentes de la pareja ganadoras, como en 1996. Posteriormente, el bar pasó a manos de dueños extranjeros y terminó cerrando.

La AQ Crepes que ha abierto era antes un Frankfurt: "Se traspasó y me enteré y lo cogí. La crepería va muy bien. Es algo nuevo para mí y para la gente de por aquí". Además, lleva las iniciales de sus dos hijos en el nombre de la crepería.

Bar Amanecer en la calle Esquíroz 5 de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY
Yolanda Bonilla en el bar Amanecer de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY


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El conocido bar de Pamplona que busca a mujeres maltratadas para darles trabajo